Hoy en día, la vida digital y móvil se expande rápidamente en más áreas de la sociedad. Como resultado, vemos una nueva mentalidad emergente donde la inquietud principal no será cómo acceder a él, sino qué hacer con él.
En la sociedad conectada, la conectividad será el punto de inicio para nuevas formas de innovar, colaborar y socializar.
Este cambio modifica fundamentalmente la manera cómo coordinamos y organizamos aptitudes.
Para innovar, colaborar, crear bienes y servicios, liderar y mantener. Este nos ubica al límite de lo que hoy vemos como un mundo conectado.
En la sociedad conectada, las pequeñas cosas hacen la gran diferencia, como son los tweets, tags, clips y likes han definido la Internet hoy en día. Este "pequeño poder" se está expandiendo hacia todos los aspectos de nuestra vida, haciéndonos fácil el participar e interactuar.
Tan pronto como estos tiempos relacione a más y más personas, la conectividad se vuelve uno de los elementos más importantes de la sociedad conectada. No podemos saber dónde y cuándo éstas necesidades puedan surgir. Y tampobo podemos predecir las soluciones. Lo que sí sabemos es que la oportunidad está cualquier lugar.
A menudo cuando imaginamos el futuro, solemos pensar en términos lineales (pantallas táctiles gigantes, autos voladores y refrigeradoras conectadas), pero cuando interconectamos las cosas, la historia nos ha demostrado que la evolución no es lineal sino exponencial.
Todo esto nos muestra una nueva forma de pensar, la sociedad conectada brinda un estado mental donde lo lógico cambia constantemente.